Las empresas que optan por la implementación de un Sistema de Gestión de Calidad (SGC) de conformidad con la norma ISO 9001, deberán de decidirse por implementar el sistema de gestión mediante el personal de la propia empresa o requerir de los servicios de una consultora.
Si la empresa decide que sea el personal el que se encargue, ésta tendrá que contar con los responsables apropiados que posean experiencia y conocimiento de los sistemas de gestión. Si por el contrario, el personal no está capacitado para lleva a cabo estas funciones, los plazos de implantación se alargaran y lograr el éxito sería mucho más difícil.
Cuando la empresa opta por la segunda opción, se contrataran los servicios externos de una entidad consultora. Para la elección de la consultora, las organizaciones tienen que considerar lo siguiente:
- Empatía: Es fundamental que el servicio, al igual que la evaluación, lo presten personas. Otros aspectos a tener en cuenta son el conocimiento y experiencia que tenga la persona colaboradora con la empresa, puesto que si se contrata sin conocer y valorar realmente al consultor, puede provocar riesgos relevantes.
- Experiencia: hay que saber si cuenta con experiencias anteriores de éxito de la implementación en otras empresas. Se valorará de manera positiva a su vez si aportan referencias verificables.
- Alcance de la contratación: La certificación e implantación del Sistema de Gestión de la Calidad implica una serie de fases. Las tres principales son: elaboración de la documentación, implementación de procesos y obtención de la certificación.
- Precios y plazos: Se establecerán los precios, plazos y tareas que se deben llevar a cabo en cada jornada.
- Establecimiento de objetivos comunes: Alineación del grado de exigencia y de excelencia para el cumplimiento de requisitos exigidos por el estándar internacional de calidad.
La Plataforma Tecnológica ISOTools permitirá a la empresa la optimización de su Sistema de Gestión de la Calidad basado en la norma ISO 9001 como camino hacia la excelencia.